Bienvenidos al tren

Bienvenidos al tren!
Sí, es posible que más de una vez descarrile. También puede hacer paradas en pueblos hostiles y estoy en condiciones de asegurar que va a transitar por parajes inhóspitos. Por momentos es más lento que el Gran Capitán y se viaja peor que en el Sarmiento. Aún así sean bienvenidas aquellas almas que quieran someterse al trajín de desempolvar recuerdos, construir anécdotas y volverse cada día un poquito más locas. Estos son mis vagones, fotos instantáneas de momentos irrepetibles. Fragmentos de un presente escurridizo que nunca se deja atrapar, porque este instante ya pasó.

lunes, 25 de febrero de 2013

Piedra libre

A veces somos dos chicos jugando a las escondidas
escapándole al dolor, corriendo de las heridas
pero es una misión suicida
pues qué otro sentido tiene
si no es el amor, la vida
incluso si no conviene
porque cuando el corazón
se adueña de la cabeza
encontramos la certeza
en plena cerrazón
¿será por esa razón
que te escondes bajo la mesa?


jueves, 21 de febrero de 2013

De nuevo

¿Cómo repensarse desde lo pensado? ¿cómo hacerse desde lo ya hecho sin caer en mera reproducción? ¿Cómo lograr el cambio sin dejar de ser uno mismo? Sintéticamente por acá venía la cosa, y de la cosa salió la prosa.

¿Existe la posibilidad de empezar de cero? y si existe, ¿la quiero? Me constituyo en mi experiencia. ¿No será en el error donde nace la ciencia? Si empiezo de nuevo pierdo tu sonrisa, pierdo tu perfume impregnado en mi mejilla. No, definitivamente no quiero empezar de nuevo.

Prefiero (re)conocerte una mañana en una mirada, esa mirada que encierra más de lo que comparte. O quizás en el roce accidental de esa mano que es sonrisa al pasarme el mate. Prefiero sorprenderme en alguna frase de esas que descolocan y me recorren. Sólo se trata de un pequeño acto, sólo un pequeño acto que nos despegue de la fotocopia del pasado que fuimos y que ya nunca seremos, por mucho que lo intentemos.